Mar Vásquez
Cuando un periodista llega a otro país profundiza más sus emociones, lo cual le permite capturar de mejor manera con su lente, voz y letra las vidas de otros personajes.
William Roberto Gómez Luna es comunicador social y productor de televisión, quien tiene años de experiencia en periodismo internacional, además el año pasado emprendió vuelo para desempeñar su labor en Estados Unidos. Ha realizado coberturas en Washington, Virginia, Pennsylvania, New York, Las Vegas, Miami y Los Ángeles. Actualmente es Corresponsal de Prensa acreditado en el Departamento de Prensa Extranjera de Estados Unidos para el Canal Región Más DX Quetzaltenango.
En esta charla nos brindó su visión periodística del migrante.
"Admiro a la persona migrante porque requiere esfuerzo y valor dejar tu tierra, a tu familia, tus costumbres, gastronomía, horarios y llegar a una tierra extraña donde lo único seguro que tienes es el anhelo de salir adelante".
William Gómez
¿Cómo ha sido tu experiencia como corresponsal guatemalteco?
Ha sido una enriquecedora experiencia, luego de laborar como catedrático universitario, periodista y productor de televisión por 17 años en Guatemala, tomar la decisión de desempeñarme como Corresponsal de Prensa en Estados Unidos ha sido un reto con metas diarias a superar.
La cultura, el idioma, el clima, vivienda, transporte, entre otros, son aspectos que no son fáciles de asimilar, pero solo el tiempo te permite adaptarte gradualmente al sistema. El clima extremo de este país te expone a las congelantes temperaturas como las de la costa este y las altas temperaturas que se experimentan en California, donde resido actualmente. Pero en medio de todas estas condiciones, ha sido gratificante documentar historias de guatemaltecos luchadores, tradiciones, gastronomía, cultura y otros aspectos chapines que sobresalen en medio de la sociedad estadounidense.
¿Cuál es la realidad del migrante desde el punto de vista del periodista?
Esta pregunta te la podría responder en dos palabras: "Retos diarios". El migrante en este gran país enfrenta día a día el reto de sobrevivir y prosperar para tener sustento para él y su familia. El alto costo de la renta y la atención médica son aspectos que minan la economía del migrante, sumado al temor que le produce cuando no tiene un estatus migratorio legal, vive una vida agitada, con alto nivel de estrés que afecta su salud y sus expectativas de vida. Pero, en medio de todas estas limitaciones, la mayoría logra mejores condiciones de vida a las que tendría acceso en su país de origen.
¿Cómo observas la migración en Estados Unidos y Guatemala?
Es un fenómeno que no se detiene, será difícil de controlar, la migración abre la oportunidad de lograr una vida mejor para las personas, pero considero que este anhelo debe ir de la mano con el respeto a las leyes del país al que uno migra, para así poder ser un miembro positivo en la sociedad. En Los Ángeles y sus alrededores encontramos decenas de guatemaltecos que han logrado regular su estatus legal y prosperar económicamente. En muchos casos, estos migrantes que logran la bonanza económica se convierten en motivadores y propiciadores para que otros compatriotas prosperen lejos de su tierra.
Migrar es un derecho humano, pero llegar a otro país conlleva también sujetarse a la autoridad y las leyes del país, lamentablemente muchos migrantes no aprovechan la oportunidad que brinda su estadía en otra nación con más desarrollo que el propio. Todos tenemos derecho a buscar un mejor nivel de vida, respetando en todo momento, no afectar la vida de otras personas.
